El chocolate puede ser dulce, y puede ser amargo. Puede estimular tu paladar completo con su complejidad. Tu cerebro se sobrecarga con el contraste y libera felicidad en hormonas, premiandote por nada, premiandote por darte placer, premiandote por hacer de tu vida una muestra de hedonismo.
El placer es el fin último de la vida, ven y compartamos mi cuerpo;
quiero servirme de tus manos y tus labios, amasando mi cuerpa a la absoluta armonía del estímulo quiero servirte con mi voz, mi sexo y mi pasión.
Seamos un hedonismo liberado, encontremos la locura en embriagante nectar del sudor
Hagamos el amor en las paredes de tu mente, dejame domarte, hasta que tu sueño se convierta en tu perdición ♥







